No es de extrañar que Stephen King, el maestro del terror, nos sorprenda cada año. Esta nueva colección de relatos nos recuerda a los inicios del autor, pero a la vez nos trae de vuelta a un personaje actual: nuestra heroína Holly Gibney, la investigadora de lo paranormal que conocimos en la trilogía de Mr. Mercedes y más recientemente en The Outsider.
La sangre manda se compone de tres cuentos largos y una novela (tiene más de 200 páginas). Cada historia es independiente la una de la otra.
El teléfono del señor Harrigan
Craig es un chico de doce años que utiliza sus tardes libres para leerle a su vecino el Sr. Harrigan, un adulto mayor adinerado que en su retiro ha decidido alejarse de la sociedad. Un día, Craig al ganarse el premio gordo en un boleto de lotería obsequiado por su vecino, decide comprarle un iPhone de primera generación. Al principio el anciano está reacio a la nueva tecnología, pero termina por convertirse en dependiente de este aparato, como lo somos todos hoy en día.
Cuando el Sr. Harrigan fallece es enterrado junto a su teléfono. En un momento de nostalgia, Craig decide hacerle una llamada, sólo por costumbre, pero se llevará una gran sorpresa cuando reciba respuesta de su amigo desde el más allá.
Ésta ha sido mi historia favorita de los cuatro relatos. Aquí King demuestra su rechazo a los teléfonos celulares una vez más (como lo hizo en The Cell). El Sr. Harrigan se cuestiona el porqué tiene acceso a toda la información que el aparato proporciona de manera “gratuita” como noticias, información de la bolsa y demás aplicaciones.
Una narración interesante, tierna, que habla de la amistad, pero envuelve algo de misterio, aunque sin resultar aterrador. Eso sí, Stand by your man de Tammy Wynette, canción que utiliza el Sr. Harrigan como tono de llamada, nunca volverá a sonar igual después de este cuento.
La adaptación televisiva de esta historia correrá a cargo de Ryan Murphy (American Horror Story) en conjunto con Netflix.
La vida de Chuck
La vida de este hombre llamado Chuck sirve de pretexto para que King haga un ejercicio de mezcla de distintos géneros en una misma historia contada al estilo Memento de Christopher Nolan, es decir de fin a principio.
En la primera parte, el escenario es apocalíptico: el mundo está llegando a su fin. La internet apenas funciona, pero por todos lados hay anuncios dándole la “enhorabuena a Chuck” por concluir sus años de servicio como contable. El resto de los capítulos de este relato nos cuentan momentos claves en forma regresiva de la vida de este hombre.
Los tres actos que conforman esta historia resultan piezas de rompecabezas que parecen embonar a la fuerza, haciendo que el relato resulte bastante desigual. A pesar de ser el cuento que menos me ha gustado, rescato la primera parte que inicia con el fin del mundo.
Ben Stiller tiene planes para llevar a cabo la adaptación de esta historia.
La sangre manda
“If it bleeds, it leads” es un término periodístico que hace referencia a que la nota que sea más traumática será la que causará mayor impacto en el espectador, incluso si es la menos relevante. Esto viene a cuenta con esta historia cuyo título da nombre al libro y en la cual Holly Gibney hace su reaparición.
Este cuento inicia dónde termina The Outsider, por lo que contiene grandes spoilers, así que, si no has leído la trilogía de Bill Hodges o el libro antes mencionado y tienes intención de hacerlo, quizá deberías esperar un poco para leer esta historia.
Después de un bombardeo a una escuela, Holly empieza a notar cosas extrañas en el presentador de noticias que curiosamente siempre cubre las tragedias más relevantes. Todo parece indicar que “el visitante” que vió Holly en Texas no era el único y ha vuelto en otro cuerpo.
Aunque no he leído los libros anteriores, disfruté mucho de la adaptación de The Outsider para HBO y me encariñé con Holly. En esta novela terminé de enamorarme del personaje. Conocer más de ella ha sido mi parte predilecta de La sangre manda, sin embargo, al enfocarse tanto en nuestra protagonista se ha perdido un poco la trama principal.
La rata
Un escritor decide irse a una cabaña para terminar su novela. Ahí aparece una rata que se ofrece a ayudarle a concluir su obra, pero a cambio de esto, un ser querido tendrá que morir.
En el primer capítulo de la nueva versión de The Twilight Zone llamado “El comediante”, un presentador de stand up bastante malo en su trabajo comienza a tener éxito a medida que utiliza a sus seres cercanos como objeto de burla en sus rutinas de comedia, estas personas a las cuales hace referencia comienzan a desaparecer mientras su carrera prospera.
Hago mención del capítulo porque, aunque me ha gustado el relato de La rata, no he podido evitar recordar este episodio, por lo cual la idea no me ha parecido del todo original. Sin embargo, se agradece el pequeño homenaje en esta historia a clásicos de King como El Resplandor y Misery.
La adaptación de La rata al parecer correrá a cargo de Darren Arofnosvksy (Mother).
Como toda colección de relatos es difícil calificar las historias en conjunto, el resultado suele variar quedando bastante impar. Si eres fan de King, esta lectura es imprescindible, pero si estás por adentrarte en su mundo, probablemente este no sea el libro con el que puedas “enamorarte” del autor.