por Jerónimo Arellano Zandi
[av_dropcap1]¿[/av_dropcap1]Salve Satanás? (Hail Satan?, Estados Unidos, 2019) es un interesante documental con tintes cómicos y sorpresas que trata acerca del “Templo Satánico”, un grupo activista político y religioso no-teísta radicado en la ciudad de Salem, Massachusetts.
Penny Lane ( Nuestro Nixon), la directora, sigue a numerosos miembros del grupo satánico en varios actos alrededor del país. Pero, sobre todo, se enfoca en Lucien Greaves, el carismático portavoz del grupo y el único miembro de alto rango que no teme en mostrar su rostro ante la cámara.
El primer acto de la cinta transcurre en Tallahassee, capital del estado de Florida. Rick Scott, el entonces gobernador, propuso imponer oración en las escuelas del estado y El Templo Satánico lo apoyó abiertamente, diciendo que la ley no especificaba la religión y que, por ende, ellos y otros grupos podían llevar su mensaje a las escuelas. Las acciones del gobernador enfurecieron a algunos sectores de la comunidad.
Los miembros de El Templo Satánico se ven a sí mismos como rebeldes y defensores de la libertad; son muy críticos de la injerencia de la religión cristiana sobre la esfera política del país, de hecho, es su razón de ser. Cada vez que políticos mojigatos cristianos (protestantes o católicos) promulgan leyes para penetrar en la esfera pública o política, miembros de El Templo estarán allí, ya que la primera enmienda de la constitución norteamericana garantiza la libertad religiosa y no especifica cuál debe ser ésta, por ende, no debe haber favoritismo.
Varios de los entrevistados confiesan haber sido creyentes cristianos o ateos, pero se decepcionaron con la hipocresía de la religión y por eso hablan del “Príncipe de las Tinieblas” como el primer rebelde, aquel que se negó a seguir a una autoridad abusiva y siguió su libre albedrío.
El documental también señala el alma provocadora del grupo. En una secuencia, se ve cómo miembros del grupo visitan un cementerio donde está enterrada la madre de Fred Phelps, un líder bautista reconocido por sus posturas radicales en contra de los homosexuales, inclusive hostigando a las familias durante sus funerales.
Sobre la tumba, realizan una “misa rosa”: parejas del mismo sexo se besan y luego declaran a la madre de Phelps lesbiana en el más allá. Aquí cabe señalar que algunos grupos religiosos hacen conversiones o bautizos post mortem, por lo que se podría decir que El Templo utiliza las armas de sus “antagonistas”.
Sin duda, el evento más fuerte que muestra el documental, es su misión de colocar una estatua de Satanás junto a una estatua de los Diez Mandamientos ubicados en El Capitolio del estado de Arkansas.
El ritmo del documental es fluido, casi jovial, los miembros de El Templo son personas que pertenecen a una comunidad que tiene mala reputación a causa de los prejuicios de una sociedad muy puritana y de los medios de comunicación que crean mitos para escandalizar.
Sin embargo, es notorio que la directora fue muy selectiva en la edición, ya que muestra al grupo de una manera muy positiva: todos unidos y sin conflictos, pero hubiera sido interesante profundizar más en los miembros del grupo.
Esta cinta cómica revela algo más de lo que hay detrás de la idea que despierta en muchos la palabra Satanás.
2 comments
Jerónimo me encanta tu trabajo! Que Horror! Aunque suene lógico, todo lo que profesan lo que atrae es el fanatismo! Que miedo! Me da ver este documental!
Muchas gracias! No da miedo el documental no te preocupes. Dan màs miedo los mojigatos.