Stan Carlisle (Bradley Cooper) quema una casa bastante deteriorada y se marcha sin mirar atrás, sus andanzas lo harán terminar en un circo itinerante. Así comienza la más reciente película del ganador del Oscar, Guillermo del Toro, la cual es una adaptación de la novela homónima de William Lindsay Gresham.
La primera escena funciona como prólogo para la película, pues nos muestra que será muy diferente a lo que nos tiene acostumbrados Del Toro, pues jugará con elementos del cine noir.
En el primer acto, Stan conoce a los artistas del circo, con quienes ira entablando diferentes tipos de relaciones. Destacan David Strathairn como el mentalista, Toni Collet como la dama de la fortuna, Willem Dafoe como el jefe del circo —quien nos muestra la forma de volver geek a cualquier borracho— y las más importante, Molly, interpretada por Rooney Mara.
Este acto es el que más se parece a los trabajos previos del tapatío, pues se nota la influencia de la película Freaks (Browning, 1932), y aparece su actor fetiche por excelencia Ron Perlman, interpretando al hombre fuerte del circo. Incluso, hay ciertos remanentes de fantasía, ya que se establece que incluso entre los timadores, existe cierto aire de magia con el Tarot.
Es hasta el segundo acto, que el director nos muestra por completo su nueva faceta, ya que se adentra en las aguas del cine noir, cumpliendo con todas sus características, la temática, la época – de manera sutil nos indica que el primer acto transcurre en 1939, y este en 1941- y lo más importante, una femme fatale, interpretada a la perfección por Cate Blanchett.
La cinta se va tornando más oscura, a la par de la personalidad de Stan, pues ante el éxito ha mostrado su verdadero ser, siendo su ambición su principal motor, especialmente al entrar en escena el excéntrico millonario Ezra Grindle (Richard Jenkins), de quien busca aprovecharse a toda costa.
A pesar de todos sus aciertos, la película no es perfecta, el segundo acto se vuelve algo lento y el final es bastante predecible. Afortunadamente, la escena final es tan potente que se puede pasar por alto.
Aunque a primera vista pareciera que Del Toro ha dejado de lado su amor y fascinación por los monstruos, la verdad es que no, simplemente ha decidido dejar de mostrar a los bondadosos, y en esta ocasión, nos presenta algunos de los más crueles y viles que han poblado su filmografía.
3 comments
Daniel muchas Gracias por esta buena invitación aunque un poco agridulce la veré! Por el papacito de Bradley!
Que querías soy mujer y este tipo me gusta mucho!
Leo, como siempre gracias por leer.
Bradley es guapo y cae bien?. Además es buen actor. Espero te guste la película.
Como bie dices Daniel, Freaks es una referencia importante en esta película y Del Toro la ha mencionado como una favorita en varias ocasiones. Gracias por la nota.