Me va a caer la ley de la liga de la decencia… pero no me importa, Cuties en Netflix es una gran película que todos deberían de ver.
Apenas dije en redes sociales que escribiría de Mignonnes, título original de la película, y me dijeron pedófilo y me insultaron. “Mejor, reseña una de Omar Chaparro”, escribieron.
Pero vamos por partes, muchos de los detractores de la película ni la han visto, no saben de qué trata y basan su odio por un cártel o en chismes; hasta en Change.org piden censurar, acabar, borrar la película, ¡Oh, Dios!, “sexualiza” a niñas, y promueve la pedofilia, eso dicen.
Cuties, guapuritas en español es una gran película precisamente por eso, es una denuncia directa y sin censura contra la sexualización infantil y nadie lo quiere ver, prefieren “quemar a las brujas” aunque sean inocentes.
Amy, es inmigrante y la hija de una familia senegaleses que lucha por sobrevivir en París que se enfrenta a un nuevo mundo y se siente atraída por un grupo de niñas “populares” que bailan música urbana y se divierten posteando en redes sociales sus aventuras, están solas.
El escandalo, hay grupo de chicas que son las contrincantes y una de ellas, enseña un seno…!!!! Dios, tapa mis ojos!!! Les digo algo… eso pasa en las redes sociales con los packs y mucho más.
En fin, Amy sufre bullying porque es de raza negra, es pobre y es la niña nueva… la pasa mal, ¿su única salida? Mostrar que puede ser más sexy y rebelde que el grupo de niñas europeas, así tenga que robar un celular y rebelarse a su familia disfuncional.
Ya lo dijo la directora, Maïmouna Doucouré, la película muestra la lucha de Amy frente a dos maneras distintos de feminidad: uno musulmana y otro occidental.
Por supuesto que Cuties provoca e incomoda, tengo dos hijas; una de 11 años y una de 20, créanme sé de lo que hablo… pero al final entiendes el mensaje: la sociedad y las redes sociales hipersexualizan la infancia; lo de hoy es bailar frente a la cámara como los youtubers, ya no quieren ser maestras o doctoras, hoy sueñan ser como Yuya o Los Polinesios. Jugar a las muñecas es para niñas bobas.
“Cuanto más sexualizada aparezca una mujer en las redes sociales, las niñas la percibirán como más exitosas”, señala, Maïmouna Doucouré, quien no tiene ningún freno para mostrar a estas niñas en situaciones que molestan, claro, pero que son necesarias para explicar un fenómeno que se ha convertido en un mounstro, dense una vuelta por tik tok, por ejemplo.
Amy se enfrenta a todo, cae en las redes sociales, cae en la desesperación y se hunde cada vez más pues no entiende nada hasta que se toma una foto de su vulva y la sube a las redes sociales, es una niña preadolescente que cree que eso le dará fama pero es desesperación por ser aceptada, por ser viral e influencer, no lo consigue.
¿La directora tenía que enseñar a niñas bailando sugestivamente en shorts pequeños y en poses sexuales?, sí, claro que sí, pero ojo no hay desnudos, sólo la mirada de una mujer preocupada por lo que ve y no tiene freno para mostrar a estas “nuevas lolitas virales”.
Sin duda, la película despierta pólemica pero es que hay que despertar la conciencia de los padres, de las familias… nuestras hijas son victimas y Cutes lo muestra de manera cruda y desgarradora.
¿Qué creen?, la realidad duele, perturba y hiere, bueno, Cuties escarba en lo más hondo de nosotros para azotarla en nuestra cara, para abofetearnos y sacudirnos: ¡Despierta, esto esta pasando!
¿Era necesario mostrar niñas así? yo creo que sí, hacerlo de otra manera hubiera sido ocultar la verdad y una realidad que, aunque lacerante, ahí esta y no se puede borrar.
Ahora sí, línchenme y acúsenme de lo que quieran: tengo hijas y sé que esto está pasando y lo he vivido; es un problema y de alguna manera debemos detenerlo. Sé que no van a ver Cuties, les da miedo… la gente prefiere taparse los ojos antes de aceptar la realidad. “No, eso no pasa”, “mi hija, jamás haría eso”, ¿qué crees lector?, sucede todo el tiempo.
Por eso, la escena final de Cuties es tan hermosa; una niña saltando la cuerda con otras niñas, sin preocuparse por likes, seguidores o ser viral, lo hace por recuperar su infancia algo que están perdiendo o se lo robaron y tú, sí tú, que pides censurar una extraordinaria película ni siquiera te haz dado cuenta, la gente prefiere censurar, borrar y voltear para otro lado. ¡Hipócritas!.
1 comment
Muy cierto lo que dice usted estoy de acuerdo, soy directora de una escuela y eso está pasando, los padres no sé dónde viven actualmente.