El Tarot Del Toro, inspirado en el trabajo del cineasta Guillermo del Toro, es una delicia visual producto del talento del ilustrador y grabador español Tomás Hijo quien se inspiró en cintas del mexicano como Cronos, El laberinto del fauno, La cumbre escarlata y El espinazo del diablo.
El estilo visual de Hijo proviene de tres escuelas diferentes: los animadores de Disney, artistas como Mike Mignola, y los grabadores e ilustradores de la Europa del Este de mediados de siglo XX. (*)
Para todo amante del cine de Guillermo del Toro este mazo de cartas sin duda es un must, sin embargo, los fans tarotistas se encontrarán con una interpretación poco usual del Tarot de Marsella, cuya lectura apunta más hacia un mundo de horror y desesperanza —más un cautionary tale (cuento con moraleja)—, que a una posibilidad de transformación.
Las primeras imágenes de los arcanos mayores de la baraja que salieron a la luz se relacionan de una manera poco usual, incluso a la inversa, con su referente tradicional, de tal manera que el significado de la carta varía demasiado, por lo que el arcano es simbólicamente y en sentido figurado, irreconocible.
Breve ejemplo: Tomemos en cuenta el primer arcano, El mago. Tradicionalmente la figura nos muestra la posibilidad de la creación y la transmutación por medio de dicho personaje, gracias a su conexión con lo divino y su capacidad para “bajarlo” al mundo terrenal.
Por su parte, el arcano de El mago del Tarot Del Toro, es una figura controladora: en su mano izquierda tiene el artefacto de la cinta Cronos, que convierte a su usuario en un vampiro del tiempo que lo vuelve inmortal. No hay conexión con lo divino aunque sí con una mezcla de ciencia y alquimia que deviene en una transmutación que arrebata la humanidad y nos coloca en el plano de lo monstruoso, de la oscuridad.
Otro ejemplo: La carta de La estrella, tradicionalmente, es un personaje femenino marcado por la buena fortuna gracias a su capacidad principalmente, para dejar ir aquello que no necesitamos o nos estorba, simbolizado por dos cántaros cuya agua está siendo vertida al río.
En las cartas Del Toro, el personaje es Ofelia, la niña de El laberinto del fauno, quien no está tirando nada, sino que parece que dejó en el piso los cántaros por distraerse con un grupo de hadas. En la mano sostiene un libro. Nos hace pensar que su actitud es la de una niña que olvida sus deberes y se evade en la fantasía.
A resreva de ver el mazo completo, el Tarot Del Toro parece estar cargado de oscuridad. Aquí la pregunta sería si las respuestas se dan a manera de advertencia o es una lectura destinada a obtener poder con un precio a pagar como se ve en el mago.
El Tarot de Del Toro estará disponible a partir del 15 de septiembre en Amazon.com
Sobre Tomás Hijo
Según su sitio web, Tomás Hijo ha ilustrado más de cincuenta libros para las principales editoriales españolas y participa regularmente en exposiciones en Europa y Estados Unidos.
Fue ganador del Best Artwork Award concedido por la Tolkien Society internacional. Su obra forma parte de las colecciones particulares de Guillermo del Toro, Steve Purcell, Richard Taylor y Mike Mignola, entre otros. Actualmente enseña Ilustración en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca.