Reseña de la película Las guerreras del K-pop (K-pop Demon Hunters), uno de los mayores éxitos de Netflix en toda su historia.
Tres hermosas mujeres, inteligentes, talentosas, sagaces, guerreras que combaten demonios no sólo con el poder de la espada, con la fuerza bruta, sino con el poder de su voz, conforman un exitoso grupo de K-pop llamado Huntrix. Ellas son las protagonistas de la exitosa cinta Las guerreras del k-pop (Kpop Demon Hunters)
Las chicas deben mantener a raya a los demonios dirigidos por una poderosa entidad llamada Gwi Ma, que vienen a la Tierra para devorar almas, y para eso combaten con ellos pero ademas, con sus armonías crean una especie de maya protectora (Honmoon) que evita que los malos entren a nuestra realidad. Dicho manto protector se construye a través de la música de las cazadoras, que por generaciones la han ido construyendo. Por lo que cada generación tiene un grupo de cantantes-cazadoras.
¿Doble vida? ¿Encubrimiento de identidad como todo super héroe? Sí y no, porque si bien Rumi, Mia y Chloe son cazadoras de demonios, cuando lo hacen parecen transportarse a una realidad que los humanos son incapaces de percibir, por lo que sus verdaderas identidades no parecen estar en peligro. Pero ¿cuál es su verdadera identidad? La de cazadoras de demonios o las de super estrellas pop?
La historia se centra en la historia de Rumi, la cantante principal, quien guarda un terrible secreto: es mitad demonio. Y con todas estas entidades tiene marcas —rayas como de tigre, de color violeta—, en sus brazos y hombros pero las oculta con su vestimenta. La teoría nos dice que si la honmoon se vuelve dorada será el fin de Gwi Ma, y por lo tanto, las marcas de Rumi desaparecerán. Y todo parece indicar que la nueva canción de Huntrix llamada “Golden” será la que haga ese “milagro”.
Las cosas por dos cosas: por un lado, en el inframundo, un demonio llamado Jinu convence a Gwi Ma de mandar a un grupo de demonios a la Tierra (con él a la cabeza) para hacer un grupo de jóvenes, o sea una Boy Band. Todo esto para contrarrestar a las guerreras. ¿Qué gana Jinu? Si el plan tiene éxito y vencen a las Huntrix, Gwi Ma borrará los dolorosos recuerdos que tiene Jinu, quien traicionó a su familia y la abandonó por vienes materiales, razón por la cual está condenado en el infierno.
Y por otro lado, Rumi comienza a perder su voz, lo cual hace imposible que puedan cantar en vivo “Golden” para terminar así con Gwi Ma y sus demonios. Rumi debe ir con un doctor alternativo para ver si puede ayudarla con su problema. En medio de esta crisis es que la banda Saja Boys (Jinu y otros demonios) se revelan ante el público ante la mirada atónita de las chicas quienes descubre que la verdadera naturaleza de los Saja Boys.
La Boy Band demoniaca no es rival en el mundo espiritual para las Huntrix y sus armas de luz, pero en lo terrenal, ambos deberán competir con su música. Luego de un primer enfrentamiento Jinu decide buscar a Rumi para intentar engatusarla y hacerla creer que él es bueno, y que sólo finge seguir el plan de Gwi May y que juntos pueden unirse para destruirlo.
Obviamente, ambos se enamorarán… pero la verdad irá saliendo a la luz y la vida de Rumi, su trabajo y el de sus compañeras podría irse a la basura. Y con esto, gran parte de la humanidad —o al menos de su cultura— quedaría a merced de los demonios.
En medio de este caos y dolor —porque Mia y Zoe se enteran del secreto de su amiga—, Rumi deberá encontrarse a sí misma, más allá de lo que le diga la amiga de su madre y maestra llll, sobre lo que debe ser. ¿Quién es Rumi? ¿Ángel o demonio? ¿Qué facción debe elegir?
En este contexto, la conclusión de la historia nos indica que la individualidad no tiene sentido si no se usa para algo más grande que nosotros, sino es capaz de jugar en equipo. Tampoco se trata de sacrificarse por el equipo, por la comunidad, por los demás, tampoco se trata de apagar nuestra voz porque de lo contrario no podrá servir para ese bien más grande, no le servirá a la comunidad.
La armonía de Huntrix no funciona sin la poderosa voz de Rumi y la voz de Rumi no puede ser tan poderosa a menos de que asuma que su esencia y fortaleza reside en ambos mundos.
Para redondear el profundo y poderoso mensaje de la historia tenemos todo un set de poderosas canciones de principio a fin, que han conseguido trascender la historia que vemos en pantalla para colarse en los charts de Billboard. El soundtrack de Las guerreras del k-pop (Kpop Demon Hunters) alcanzó el número 1 del Billboard 200 Albums Chart, mientras que Golden se convirtió en uno de los 10 éxitos más longevos en mantenerse en el Bilboard Hot 100.
La cinta es todo un fenómeno mundial de tal manera que, al menos en México, acaban de lanzar la cinta en la cartelera cinematográfica, confiados en que los niños irán al cine y seguirán viendo a las Huntrix en su plataforma. Definitivamente la cinta debe figurar en los premios Óscar pues sin duda es una de las mejores películas animadas de los últimos años.