Por Daniel Villamil
“Let the past die. Kill it if you have to. It’s the only way to become what you were meant to be”, dice Kylo Ren en algún momento de la historia. Y es con esa frase que Rian Johnson indica el tono y dirección de Los últimos Jedi (The Last Jedi, EU-2017) el octavo episodio de Star Wars.
Así es, estamos ante un episodio que rompe con las reglas establecidas en la galaxia creada por George Lucas hace 40 años, en pos de atraer nuevas generaciones y evolucionar una de las franquicias más exitosas y queridas en la historia de la cultura pop.
El problema es que Johnson se queda a la mitad del camino y no mata el pasado (con todo y que prácticamente Ben Solo dice la frase en cada aparición que tiene), simplemente intenta homenajearlo, usar lo que le gusta y meter, de manera no bien lograda, el nuevo rumbo de la “ya no tan “saga” galáctica. En otras palabras, no sigue la máxima del maestro Yoda “Do or do not. There is no try”.
La película tiene algunos de los momentos más impactantes dentro de la serie, como Luke y Leia usando la Fuerza de maneras nunca antes vistas pero coherentes con lo establecido en las películas anteriores, sin embargo estos momentos se ven opacados por una trama que a pesar de vivir bajo el mantra “dejar morir el pasado”, repite la estructura del Episodio V: separar a los héroes con misiones independientes resultado de la evacuación apresurada de su base por la persecución de los villanos.
Lamentablemente Johnson no cuenta con la maestría de Leigh Brackett y Lawrence Kasdan, por lo que vemos meras caricaturas de personajes entrañables como Lando Calrissian y subtramas que no llevan a ningún lado, siendo Rose y Finn los más afectados. Todas sus peripecias en el planeta Canto Bight son un mero pretexto para un momento que parece de los anuncios de PETA y cuando logran llegar a su destino, mágicamente los villanos saben todo, incluso el plan secreto del escape de la resistencia, algo que ni los que estaban en la nave rebelde sabían, excepto por Amilyn Holdo. Podrías cortar toda esa parte de la película y no se vería afectada la narrativa. Ya ni hablemos de los nuevos AT-AT con una mini estrella de la muerte listos para atacar una base rebelde en un planeta de superficie blanca, claro para ser original no es nieve, es sal.
Hasta aquí suena a un blockbuster tradicional con errores típicos del género que satisface a los fans, entonces ¿por qué ha recibido tantas críticas de los fans? Sencillo, quita del lugar predominante a los Skywalker para dar paso literal a cualquier hijo de vecino para ser el héroe. Esto no suena mal, de hecho la escena final con el eco del atardecer de dos soles y el niño barrendero es hermosa, pero con eso corta de tajo el legado de la familia por la que existe esta franquicia y es una saga. Es entendible que Disney necesita seguir explotando la marca, pero no estamos hablando de los Avengers, donde no importa quienes son los integrantes del equipo mientras se dediquen a salvar al mundo y a todos los desprotegidos.
Al final del día Star Wars es la historia de la familia Skywalker, de sus integrantes luminosos y oscuros. Y esto resalta más cuando el mismo Bob Iger anunció las películas de antología como Rogue One, donde se exploran otros rincones de ese rico universo pero sin centrarse en los descendientes de Anakin, y es dentro de ese acuerdo que los fans acogen la cinta de Diego Luna, saben que verán cosas nuevas pero que se le respetara su lugar a la familia real de la creación de Georges Lucas.
Así es como este octavo episodio falla, pero como bien dice cierto personaje en la misma “los errores son los mejores maestros”. Sin duda esta polarizante película deja bases interesantes para el futuro de la galaxia muy muy lejana que Disney podrá explotar, pero entendiendo que el pasado debe respetarse sin que esto signifique que no pueda haber una evolución, tal y como demostró Blade Runner 2049.
Calificación 3 de 5
2 comments
En verdad se te hace coherente que leia pueda desplazarse en el espacio después de haber perdido el conocimiento cuando en ningún episodio pasado había demostrado manejar la fuerza, entiendo que pueda sentir la fuerza y comunicarse con luke pero hacer eso es para nada coherente
Han abordado un buen punto: la familia skywalker.Pero ademas de eso, muchos coincidimos en que lagran falla de la película , es que parece que estamos viendo otras películas menos starwars, por ejemplo un episodio cualquiera de startrek, los vestuarios de los juegos del hambre, situaciones cómicas estilo avengers, leia voladora en el espacio estilo los guardianes de la galaxia, una muy debil razón por la que luke se va al exilio, etc.El director en su afan por hacer atractiva la franquicia a las nuevas generaciones hace uso del dicho adaptarse o morir, pero a la pelicula le sobró paja y le faltó trama, desperdicio personajes y sobre todo desperdicio la escena final que bien lograda hubiera sido el final perfecto para el episodio IX dejando la puerta abierta para nuevas películas que no involucraran a los skywalker. En general de acuerdo con todo lo que han publicado.